Entre las mejores marcas de hervidores eléctricos están Oster, Imaco y Thomas. Los hervidores Oster se caracterizan por su durabilidad y facilidad de limpieza, además, vienen en diferentes tamaños y modelos. Imaco destaca por su buena relación calidad-precio; incluso ofrece hervidores de agua de acero inoxidable a un precio accesible.

Thomas, por su lado, destaca por su amplia gama de modelos; los cuales en su mayoría cuentan con un filtro en la boquilla para no dejar pasar el sarro u otras impurezas.

Para saber cuánto consume un hervidor eléctrico de agua debes hacer lo siguiente: Primero, convierte los watts (W) en kilowatts (KW) dividiendo los watts de la etiqueta de consumo energético (que viene pegado en el artefacto) entre 1000.

Luego, multiplica ese resultado por la cantidad de horas que mensualmente usas tu hervidor. Esta cifra indicará los kilowatts horas (KWh) consumidos por mes. Ahora solo mira tu recibo de luz y fíjate cuál es el monto en soles que tu compañía eléctrica asigna a esos KWh. ¡Listo! Así sabrás cuánto gasta un hervidor de agua.

Entre las principales diferencias de una tetera tradicional con un hervidor eléctrico están la capacidad del artefacto, el tiempo de hervor y el consumo energético. Una tetera tradicional suele tener más capacidad que un hervidor eléctrico (puede llegar a los 4 litros, mientras que es más común ver hervidores que no superan los 2 litros).

Por su lado, sin embargo, a los hervidores eléctricos solo les toma unos cuántos minutos hervir el agua, mientras que las teteras tradicionales tardan alrededor de media hora. Finalmente, el consumo de un hervidor eléctrico es menor que el de una tetera convencional; a largo plazo probablemente estés pagando más por el uso de una tetera tradicional que por un hervidor eléctrico.

Es importante no confundir una tetera tradicional con una tetera eléctrica; esta última es básicamente un hervidor eléctrico tipo tetera.

No lo es, siempre y cuando elijas los materiales de fabricación adecuados. Lo más recomendable es que optes por un hervidor de agua de acero inoxidable de calidad porque es menos dañino para la salud. También puedes optar por hervidores de plástico, pero asegúrate de que estén libres de BPA.

En el mercado también existen hervidores eléctricos de cerámica, aluminio, hierro fundido, cobre, entre otros, pero es mejor evitarlos, ya que los compuestos químicos con que están hechos son muy perjudiciales.